¿Podemos comer de todo? Yes, We Can
Siempre hemos estado oyendo durante mucho tiempo que tal alimento es malo o engorda mucho, y que por ello debemos de tener cuidado a la hora de consumirlo. Pues bien, en nuestra opinión (y sin ser especialistas) podemos deciros que se puede comer de todo, simplemente hay que mantener un poco de orden y sobretodo hacer ejercicio.
¿Qué NO debemos comer?
Es importante tener en cuenta que hay alimentos que son claramente malos para nuestra salud, de hecho todos aquellos que tienen un origen industrial, tienen mayores probabilidades de hacer crecer en masa corporal.
Hay un pequeño truco para conocer qué alimentos tienen muchos aditivos, y es el siguiente. Cuando miréis en la composición de los productos, podéis observar que en algunos casos aparecen aditivos denominados con la letra "E" seguido de un número (ejemplos: E-120, E-300). Pues bien, cuando se dice que cuando existen más de 3, no son nada saludables para nuestro organismo.
Existe una evidencia cierta, y es que las siguientes comidas no son para nada sanas para nuestro cuerpo (el que no la haya probado que tire la primera piedra):
- Bollería industrial (donuts, palmeras, bollicaos y largo etc).
- Comida rápida (hamburguesas, pizzas, kebabs y muchos más).
- Refrescos con gas (no hace falta que los mencione porque ya los conocéis).
¿Y entonces qué comemos?
Antes de nada debemos tener claras 2 cosas claras:
1.- El ejercicio es necesario.
No hace falta que vayas al gimnasio, puedes hacer cualquier otro deporte (hay infinidad). Y si eres de los que no les gusta nada hacer deporte, camina mucho con frecuencia. Según los grandes especialistas deportivos, el mejor ejercicio es caminar. Vete al trabajo caminando (siempre que sea posible), sube por als escaleras sin utilizar el ascensor, cualquier momento es bueno para movernos.
2.- No comas entre horas
Intenta respetar las comidas (desayuno, comida y cena). Y si vas a comer algo entre horas, intenta que sea fruta. Recuerda que debes hacer lo que dice la siguiente cita:
“Desayuna como un Rey, almuerza como un Príncipe y cena como un Mendigo”
Tan importante es la cantidad de lo que comemos como cuándo lo hacemos.
Alguno dirá, pues después de todo esto no tengo muy claro qué puedo comer. No te preocupes, como decía Jack El Destripador, vamos por partes.
Por poner un ejemplo, a quién no le gustan las croquetas. Un alimento tan común que muchas veces está relacionado con grasa porque se fríe en aceite. Este producto suele estar generalmente hecho de jamón, queso o pescado (muy ricas por cierto), pero también se pueden preparar más ligeras agregándole verduras o setas como los boletus.
Con dicho ejemplo, quiero haceros ver que es posible comer alimentos que en teoría dicen que engordan de una forma más sana para quien no se los puede permitir por su constitución física. Evidentemente hay gente, que por su metabolismo se tendrá que cuidar más que otra.
En conclusión, distribuye tus comidas de forma que sin abusar en cuanto a las cantidades puedas ingerir todo tipo de productos de nuestra gastronomía. Es decir, que no tienes por qué estar todo el día comiendo lechuga.
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